Bebivita Leche de Continuación 3, 500 g

Dependiendo de la edad y desarrollo, los niños tienen diferentes necesidades, incluso en lo que respecta a la dieta. A partir de los diez meses, la mayoría de los bebés ya consumen comidas sólidas con regularidad; en consecuencia, el contenido de nutrientes y vitaminas de las comidas a base de leche también debe adaptarse a esta forma mixta de nutrición.

Por eso la leche de continuación 3 de Bebivita es una fórmula ideal para bebés a partir de los diez meses. Es agradable, cremosa y con buen poder saciante. Idealmente, a esta edad, el niño ya debería estar bebiendo la leche de continuación en una taza o vaso. Este producto no es adecuado como sustituto de la leche materna en los primeros meses de vida (ni como único alimento ni como dieta complementaria). Dependiendo del desarrollo individual de cada niño, leche de continuación 3 de Bebivita a veces se puede administrar antes del décimo mes de vida, pero solo después de consultar al pediatra.

Dosificación: desde el inicio de la finalización de la lactancia, los bebés suelen necesitar cinco comidas al día, repartidas entre biberones y comidas sólidas. El biberón puede ser reemplazado gradualmente por comidas a base de papillas y puŕes para bebés. La cantidad de leche y comida que toma el bebé en cada comida es personal y, a menudo, varía de un día a otro y de un bebé a otro. La mejor opción es orientarse siempre según las necesidades del niño. La siguiente tabla ofrece indicaciones generales sobre la proporción de mezcla entre agua y polvo. Recomendamos utilizar la cuchara medidora de Bebivita incluida en el paquete (1 cuchara medidora rasa = aproximadamente 4,4 g de leche de continuación 3 de Bebivita).

Modo de preparación:

1. Hervir el agua y dejarla enfriar a unos 40-50 °C.
2. Verter el agua hervida y enfriada en el biberón.
3. Coger el polvo (cantidad según la tabla de dosificación) con la cuchara medidora. Llenar la cuchara medidora y retirar el exceso de polvo con el dorso de un cuchillo.
4. Agregar el polvo al biberón y cerrarlo bien.
5. Agitar enérgicamente.
6. Dejar enfriar aproximadamente a 37 °C (temperatura de consumo).
7. ¡Siempre controlar la temperatura antes de dar de comer al bebé!